Con más de tres meses de vida, los cachorros de Nanay y Ariranha ya comenzaron a ser más independientes de sus padres. La Fundación Rewilding brindó un reporte sobre los animales y detalló: “Nadan por su cuenta, maman muy poco y se encuentran comiendo sus primeros peces”.
Estos cuatro pequeños son grandes protagonistas de la recuperación de su especie en Iberá (Corrientes) y El Impenetrable (Chaco). Según detallaron las nutrias aún habitan un corral de presuelta, “donde esperamos que se consolide un gran grupo familiar, y en un futuro vivirán libres en las salvajes aguas del norte argentino”.
De esta forma crece la segunda camada de cachorros nacida en Iberá, y con ellos crece la esperanza de recuperar al depredador tope de las aguas argentinas.

































