La diputada Marcela Pagano intentó convocar a distintos bloques para enviar a la Embajada de Francia en Buenos Aires «un tocado de flores» a modo de desagravio a las monjas Alice Domon y Léonie Duquet, secuestradas y desaparecidas por el represor Alfredo Astiz, uno de los genocidas que visitaron los seis legisladores libertarios hace 15 días en el penal de Ezeiza.
La idea de la periodista era congregar a representantes del más amplio abanico ideológico, para mostrar el compromiso de todos los espacios con el sistema democrático y el esclarecimiento de los crímenes de lesa humanidad.
Tan es así que, hasta donde supo LPO, planeó sumar al envío del arreglo floral, con un acto incluido en la Iglesia de la Santa Cruz para el próximo 9 de agosto, a diputadas como Cecilia Moreau, a quien estima y respeta para fastidio de colegas de su bancada, y Vanina Biassi, flamante integrante del Frente de Izquierda de los Trabajadores (FIT).
Además, habría confirmado su adhesión a la ceremonia la pichettista Margarita Stolbizer y María Eugenia Vidal declinó la invitación porque no podía estar presente esa fecha. Desde la izquierda también habrían rechazado el convite.
Fuentes parlamentarias informaron que Pagano forma parte de los legisladores mileístas que pretenden que se abra una investigación «para ir a fondo» en la búsqueda de responsabilidades por la reunión con Astiz y los demás militares sentenciados. Como publicó LPO, la rosarina Rocío Bonacci detonó un bombazo el sábado por la noche, cuando en un canal de cable de su ciudad natal expresó que Martín Menem y la Casa Rosada habían dado el OK para la expedición a Ezeiza.
En ese contexto, Pagano habría acelerado sus contactos para restañar la imagen del bloque por el encuentro de sus colegas con genocidas condenados. Su posteo en Twitter el pasado 26 de julio, al cumplirse un nuevo aniversario de la partida de Eva Perón, desató rabia y malestar entre los libertarios antiperonistas porque, para colmo, la legisladora extendió su mensaje con saludos y reconocimientos a sus pares de Unión por la Patria en general y Cristina Kirchner en particular.
LPO ya reveló que hay un puñado de legisladores disconformes con la conducción de Menem, que observan con interés el interbloque que Oscar Zago apura con Cristian Ritondo.
Con esta crisis como telón de fondo, la falta de contención de Menem y Gabriel Bornoroni podría darle a la jugada del MID y el PRO más volumen del que esperaban sus impulsores.