El estreno del nuevo ministro de Desarrollo Humano, Diego Gutiérrez, dejó más dudas que respuestas. En medio de un fuerte temporal que azotó a Resistencia, con casi 200 milímetros de lluvia en 36 horas, su primera gran prueba de gestión terminó en un operativo de asistencia social sin planificación ni capacidad de reacción.
🚨La entrega de módulos alimentarios del programa Ñachec se realizó a la intemperie, obligando a cientos de vecinos de barrios como Don Santiago, Aromito y Cristo Rey a hacer largas filas bajo la lluvia y en calles anegadas. Personas mayores, madres con niños y vecinos con discapacidad debieron esperar durante horas para recibir un bolsín de alimentos, sin que el Ministerio dispusiera lugares cubiertos o alternativas ante la emergencia climática.
⛈️Mientras la ciudad enfrentaba evacuaciones y graves problemas de transitabilidad, la orden fue mantener la presencialidad estricta, con DNI en mano y sin excepciones. La necesidad empujó a la gente a quedarse, aun bajo el fuerte temporal. La respuesta del Estado, en cambio, fue la ausencia de decisiones y de sensibilidad.
👉El debut de Gutiérrez expuso la escasa capacidad de su gabinete para coordinar y resolver en un contexto crítico. Lejos de mostrar conducción y adaptación frente a la crisis, el Ministerio dejó una imagen de improvisación que reaviva las críticas sobre el modelo de asistencia social del gobierno provincial.































