Los puntos de preocupación de la asociación son numerosos. Uno de ellos es la enorme falta de insumos y elementos básicos de trabajo, como también de recursos humanos.
“En toda la provincia se observan faltantes de medicamentos, agujas, insumos elementales y básicos que impiden una correcta atención a la ciudadanía que se atiende por la salud pública. En muchos lugares ni siquiera cuentan con paracetamol agravando aún más la situación. Pero aún más grave es la falta de recursos humanos para atender la emergencia sanitaria que estamos atravesando, hay faltante de profesionales que se agrava en esta coyuntura actual y que debe ser solucionado para poder brindar un servicio sanitario acorde a las necesidades de la población”.
Agregaron al respecto que la situación vinculada a insumos preocupa aún más en el corto plazo, ya que “desde el gobierno nos indicaron que no se podrá efectuar ninguna compra de insumos ni medicamentos hasta el 15 de enero, ya que por el receso administrativo el sector de Compras y el SAFYC están cerrados y no se puede procesar nada, por lo que nos esperan unos diez días de altísima complejidad en el sistema sanitario si no hay acción del gobierno en ese sentido tanto en lo referido a insumos como también al recurso humano”
Vinculado a ello, APTASCH denuncia episodios de violencia que deben ser “urgentemente atendidos ya que se dan en dos niveles: de la población hacia los trabajadores a raíz del hecho de no tener insumos básicos para tratar sus problemáticas; pero también se están dando situaciones de violencia de los jefes hacia los trabajadores, muchos de ellos ya denunciados, que afectan de manera muy contundente a la salud pública toda y requiere la atención del ministro y del equipo del ministerio”.
Otro punto de altísima preocupación para el gremio está en la situación de los trabajadores precarizados. “Pese a que el gobernador prometió la continuidad de los contratos de obra y de servicio para trabajadores de salud pública, lo cierto es que hoy esos trabajadores no tienen certeza alguna al respecto y están trabajando sin un instrumento legal que garantice su posición y lugar de trabajo. Además, es imprescindible que los montos de los contratos de servicio tengan una evolución acorde a la inflación, ya que los mismos están altamente desactualizados. Hoy los contratos de servicios de profesionales oscilan entre los $ 250.000 y $ 340.000 para un personal que cumple con 44 horas semanales de trabajo. Esos bajos montos, no actualizados según costo de vida impide, entre otras cosas, alcanzar el objetivo de retener en el sistema sanitario a los profesionales y que cumplan efectivamente su carga horaria”.
En esa misma línea, pero en referencia a la situación de los pases a planta, APTASCH reclamó certezas. “El gobernador anunció días atrás la apertura de un concurso para cubrir cargos en salud pública, pero no debemos dejar de lado el hecho de que ya hubo un concurso con una ley detrás y que todo el proceso administrativo de inscripción y realización de exámenes ya se hizo pero todo quedó frenado”. “Afirman luego que “el gobierno debe respetar el hecho de que los trabajadores, que hoy son rehenes de disputas políticas, ya cumplieron su parte del proceso y llamar a otro concurso sería destratar, desmerecer y perjudicar a trabajadores que están en el sistema hace cinco, diez e incluso veinte años que merecen y necesitan su pase a planta”.
Lo salarial es otro aspecto de extrema preocupación para APTASCH. Con el último aumento de diciembre del 12%, el salario básico de un caso testigo en salud pública cierra el aumento con un incremento del 96,7% aunque una inflación que se espera se ubique en el 216% anual. Esto equivale a una pérdida de poder adquisitivo cercano al 40%, la más grande de por lo menos los últimos veinte años según los cálculos del gremio. “El enorme deterioro del poder de compra del salario de los trabajadores de salud pública no puede ser pasado por alto por el gobierno y de manera inmediata debe comenzar un proceso de diálogo con los representantes de los trabajadores para encontrar soluciones a esta situación y que nos permita tener un horizonte de cara, por lo menos, al primer semestre del año”, detallaron.
APTASCH señaló que “el estado de deterioro y constante crisis de la salud pública no es nuevo sino que lleva muchos años. Como gremio hemos llevado adelante una fuerte lucha durante las gestiones anteriores y los archivos de esos tiempos nos avalan: nunca nos quedamos quietos ni callados. Entendemos que el gobierno nuevo liderado por Zdero está en proceso de conocer la situación con mayor profundidad y podría llevar algún tiempo dar soluciones, pero le pedimos que corten con las denuncias mediáticas y con la confrontación con el gobierno anterior y se pongan a trabajar. A la fecha, no hemos tenido ninguna respuesta a los pedidos de audiencia y la situación no está dada para esperar mucho tiempo: si se alargan los tiempos y se postergan las decisiones, la salud pública puede colapsar”.
“Por todo ello, pedimos de manera urgente soluciones al ministro Rodríguez y al gobernador Zdero y también solicitamos que trabajen de frente, y no a las espaldas de los y las trabajadoras, ya que son justamente ellos los que sostiene el sistema de salud pública chaqueño y los que brindan a la comunidad la atención que demandan”, finalizaron.