Una ONG advirtió de la escalada represiva del régimen de Miguel Díaz-Canel contra su pueblo en el último mes e instó a la comunidad internacional a no permanecer indiferente ante estas agresiones
El Instituto Cubano por la Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP) denunció que, durante octubre, el régimen de Miguel Díaz-Canel perpetró al menos 74 violaciones de estos derechos fundamentales, es decir, el doble de los incidentes registrados en septiembre.
Del total, el informe de la ONG independiente precisó que 28 fueron casos de ofensivas contra la libertad de prensa y 46 contra la libertad de expresión, destacando 27 “ataques, amenazas y/o agresiones psicológicas, 18 detenciones arbitrarias, 11 usos abusivos del poder estatal, ocho restricciones en el espacio digital, seis reclusiones y cuatro agresiones físicas”.
Asimismo, indicó que entre las víctimas hay 17 periodistas, ocho presos políticos, cuatro opositores, tres activistas y tres creadores de contenido para redes sociales que, en muchos casos, fueron atacados durante la cobertura de las protestas que se desataron en la isla por la crisis energética y el apagón total de tres días, a mediados de octubre.
Muchos de ellos fueron “interrogados, amenazados y grabados autoinculpándose de delitos que no cometieron” y, posteriormente, “obligados a renunciar públicamente en redes sociales a su trabajo”, advirtió el documento. Inclusive, cuatro periodistas y directores de medios comunitarios del ICLEP fueron “citados simultáneamente” por las fuerzas del régimen, “interrogados y amenazados para no continuar con su labor”.
“Preocupante resultó durante octubre la escalada represiva que continuó la dictadura contra los periodistas y colaboradores de medios independientes como CubaNet, El Toque y Periodismo de Barrio”, sumaron los expertos del Instituto, que lamentaron a continuación que “en medio del colapso energético y con falta de combustible, el régimen destinó recursos a vigilar, acosar y reprimir periodistas y colaboradores de medios independientes y del ICLEP”.
“La represión del régimen cubano se extiende a cualquier frente en el que, por asomo, vea algún peligro que amenace su permanencia en el poder. Las violaciones a la libertad de expresión y prensa ocurridas durante octubre evidencian claramente que la dictadura no escatima en esfuerzos para silenciar a sus ciudadanos”, repudiaron también desde la ONG.
A la par de estas agresiones, la organización sin fines de lucro Prisoners Defenders contabilizó 1.117 presos políticos en la isla, lo que también expone un aumento de la persecución contra las voces disidentes. Con la incorporación de ocho personas, detenidas por protestar en medio del apagón total, La Habana cerró octubre con el segundo mayor registro de privados de su libertad por estas causas en lo que va del año.
Entre las víctimas se destacó la situación de 30 menores, en su mayoría cumpliendo penas por supuestos delitos de “sedición”.
“Todos (ellos) son torturados de forma escatológica”, están privados de “tratamiento médico y psiquiátrico adecuado” y se desatienden los casos “con patologías médicas graves”, expuso el informe mensual.
Uno de los casos más denunciados es el de Nelson Caballero Díaz, quien fue arrestado en Camagüey por exigir el restablecimiento del suministro eléctrico, semanas atrás, y fue golpeado y privado del contacto con su familia y su equipo legal. También, el pastor Domínguez Muñoz fue detenido en Granma en septiembre, simplemente por llevar un cartel en contra de Díaz-Canel, y desde entonces se mantiene sin acceso a una legítima defensa.
(Con información de EFE)