La intendenta de Quilmes recibió a dos de los ministros más cercanos del gobernador. Actividades de gestión que generaron ruido.
Mayra Mendoza recibió esta semana en Quilmes a dos de los funcionarios más cercanos de Axel Kicillof en medio de las críticas La Cámpora hacia el gobernador. Fueron actividades de gestión que generaron ruido en medio de la interna kirchnerista.
El martes, la intendenta de Quilmes recibió al Cuervo en Villa Itatí para la reapertura del centro de reciclado de la Cooperativa de Cartoneros de Villa Itatí, cuyas instalaciones habían sido destruidas en 2021 por un incendio.
«Como nos indica Kicillof, en la provincia vamos a seguir apoyando a las organizaciones comunitarias», dijo Larroque. En el acto estuvo también la titular del Opisu, el organismo cuestionado la semana pasada por el intendente de Lanús, Julián Álvarez. Otro dato curioso: en el comunicado del ministerio de Larroque no se consignaron declaraciones de Mayra.
Larroque supo ser secretario general de La Cámpora, pero rompió con Máximo para ser uno de los hombres más importantes en el armado político de Kicillof. El kirchnerismo lo señalan como el artífice del distanciamiento que con los meses el gobernador fue construyendo respecto de Cristina.
En tanto, este jueves Mayra recibió al ministro de Salud, Nicolás Kreplak, y juntos recorrieron los avances del nuevo Centro Comunitario de Salud Mental. El ministro hizo un equilibrio imposible en medio de la crisis entre Cristina y Kicillof.
Entre los funcionarios de Cristina dentro del gabinete, Kreplak es el único que La Cámpora teme perder. Se sabe que el ministro orbita muy cerca del gobernador, quien le dio todo el manejo de la cartera de Salud, pero el funcionario es quien más siente la presión de ambas partes.
Las visitas de dos ministros de Kicillof a Quilmes en una misma semana generaron especulaciones. Algunos trascendidos daban cuenta de un intento de La Cámpora de acercar a la agrupación a los funcionarios del gobernador.
Esta semana, la agrupación de Máximo Kirchner no cedió en sus críticas al gobernador por su negativa a respaldar a Cristina en la interna del PJ.
«No sé qué le pasó (a Kicillof) por la cabeza. Yo le diría que si tiene carroñeros que se alimentan de esta pelea, que vuelva a la esencia. Volvé a la esencia hermano», dijo ayer la camporista Anabel Fernández Sagasti.
En tanto, en el entorno de Kicillof dan por cerrado el conflicto y no responderán a ninguna de las críticas de La Cámpora. Sin embargo, creen que las hostilidades por parte de la agrupación de Máximo Kirchner seguirán por varios días.
Las visitas de ministros de Kicillof a Quilmes parecen haber calmado la nueva fase del conflicto que se abrió la semana pasada cuando el intendente de Lanús salió a cuestionar el desfinanciamiento de la obra pública en su distrito y cruzó al gobernador.
El intendente apuntó al OPISU y al ministerio de Infraestructura por «abandonar la obra y retirarse». Se trata de un proyecto de urbanización y relocalización en Villa Caraza que Álvarez terminó con fondos municipales.
