Ya sea por falta de crédito, para no consumir innecesariamente datos o porque estamos trabajando o estudiando fuera de casa, muchas veces solemos confiar y respaldarnos en distintas redes de wifi que ofrecen conexión gratuita. Aunque esto puede ser útil, las redes públicas de internet a las que solemos “colgarnos” cuando no tenemos conexión plantean una serie de riesgos importantes que es necesario tener en cuenta a la hora de tomar esta decisión.
Para Fabio Sánchez, director de Ciberseguridad de OCP TECH, es importante adoptar las siguientes tres recomendaciones si nos encontramos, por el motivo que sea, frente a la necesidad inevitable de conectarnos a una red pública de internet mientras nos encontramos fuera de casa.
1) Ataques de intermediario
El peligro más importante al que nos exponemos es al ataque denominado Man-in-the-Middle o MitM (ataques de intermediario). En una red pública es factible que un atacante pueda interceptar la comunicación entre nuestro dispositivo y el servidor al que intentamos acceder. “Si lleva adelante esto con éxito -sostiene Sánchez-, puede capturar datos sensibles, como credenciales de acceso, datos bancarios o información personal.
La contramedida más eficaz para este caso es la utilización de una VPN (Virtual Private Network). Esto permite cifrar nuestra conexión, lo que impide que los atacantes puedan interceptar esta información”. La costumbre de utilizar una VPN evita muchísimos problemas, y no sólo en el contexto de redes públicas de internet.
2) Redes maliciosas falsas
Otro peligro al que hacemos frente si decidimos colgarnos del wifi gratis es el de las redes maliciosas falsas. “Los atacantes pueden crear redes de wifi falsas con nombres similares a redes legítimas. Al conectarnos a una de estas redes damos vía libre a su creador para el robo de datos o la infección de nuestro dispositivo con malware”, explica Sánchez.
En este caso, la prevención es similar a la que recomienda en casos de emails que contienen spam o malware: verificar siempre el nombre exacto de la red pública gratuita antes de conectarnos a ella. Para esto es también recomendable consultar con personal del lugar (shoppings, aeropuertos, etc.) sobre la legitimidad de la red que a la que vamos a acceder: mejor prevenir que curar.
3) Malware y spyware
Por último, e independientemente de las prevenciones que hayamos tomado hasta acá, usar redes públicas de internet aumenta el riesgo de malware y spyware. “Por lo general estas redes carecen de seguridad adecuada, lo que las convierte en terreno fértil para la propagación de malware”, advierte el especialista en ciberseguridad. Al conectarnos a ellas, nuestro dispositivo podría infectarse con software malicioso que roba datos o compromete la seguridad del mismo.
Para Sánchez, la contramedida más efectiva está en mantener actualizado el software de seguridad de nuestro equipo y usar un firewall (además de una VPN), pero lo más importante es evitar acceder a aplicaciones o sitios sensibles, como el homebanking, mientras utilizamos una red pública de internet.
Las redes públicas de internet son cómodas y sobre todo útiles, pero debemos tener siempre presente los peligros asociados a su utilización. La buena noticia es que adoptar medidas preventivas, como utilizar una VPN, verificar la autenticidad de la red o mantener actualizado nuestro software de seguridad, son pasos decisivos que podemos tomar nosotros mismos a la hora de proteger nuestra información personal y financiera. Siempre debemos tener presente lo siguiente: al final del día, la precaución termina siendo la mejor aliada del mundo digital, sobre todo en entornos vulnerables como el que acabamos de describir.