La urgencia ha aumentado a medida que la cifra de palestinos muertos en la ofensiva israelí se acerca a los 30.000, según información de Hamas, y aumentan las presiones internas sobre Biden, en un año clave en el que su apoyo a Israel puede complicar su reelección, y sobre Netanyahu, a quien las familias de los rehenes exigen un acuerdo con el grupo islamisma ya.
Además, los planes anunciados por Israel para lanzar un ataque terrestre en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, han provocado alarma global por la suerte que podrían correr más de un millón de civiles palestinos atrapados en esa ciudad fronteriza con Egipto, la mayoría de ellos tras haber abandonado sus casas por los combates y bombardeos en otras partes del enclave.
Las conversaciones para detener los combates cobraron impulso recientemente y estaban este martes en curso en Qatar, uno de los países mediadores.
Funcionarios de Qatar, Estados Unidos y Egipto han estado trabajando en una propuesta de acuerdo que, según autoridades y medios, permitiría a Hamas liberar a algunos de los rehenes que tiene a cambio de la excarcelación de presos palestinos, una suspensión de seis semanas de los combates y un aumento de las entregas de ayuda humanitaria a Gaza.
El inicio del Ramadán, que se espera el 10 de marzo, es visto como una fecha límite para llegar a un acuerdo. El mes sagrado es una época de mayor fervor religioso y de ayuno diario para cientos de millones de musulmanes de todo el mundo y en el pasado coincidió con un fuerte repunte de las tensiones entre israelíes y palestinos.
«El Ramadán está cerca y ha habido un acuerdo de los israelíes de que no realizarán actividades durante el Ramadán para darnos tiempo de sacar a todos los rehenes», dijo Biden anoche en una entrevista en un programa de la cadena de televisión NBC.
Más temprano, el presidente dijo que esperaba que el acuerdo de tregua se alcanzara la semana que viene.
«Mi esperanza es que tengamos un alto el fuego para el próximo lunes», dijo Biden a periodistas durante un viaje a Nueva York.
«El Ramadán está cerca y ha habido un acuerdo de los israelíes de que no realizarán actividades durante el Ramadán para darnos tiempo de sacar a todos los rehenes»Joe Biden
Funcionarios israelíes citados por medios de Estados Unidos dijeron que los comentarios de Biden fueron sorpresivos y no se hicieron en coordinación con el Gobierno del país.
Netanyahu «se sorprendió» por la afirmación del presidente de que se estaba cerca de una tregua entre Israel y Hamas, informó la cadena estadounidense ABC, que citó a un funcionario israelí de alto rango que no fue identificado, que agregó que el grupo palestino sigue presentando exigencias desmedidas.
Un funcionario de Hamas, Ahmad Abdel-Hadi, minimizó los avances y dijo que el grupo, que exige que Israel ponga fin definitivo a la ofensiva y retire a todas sus tropas de Gaza, no suavizará sus demandas.
«La resistencia no está interesada en renunciar a ninguna de sus demandas, y lo que se propone no cumple con lo que había solicitado», dijo el dirigente de Hamas al canal de televisión panárabe Al Mayadeen.
En conferencia de prensa en Doha, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Qatar, Majed al-Ansari, dijo que el emirato era «optimista» sobre las conversaciones, sin dar más detalles.
El portavoz manifestó que no tenía comentarios sobre las declaraciones de Biden, que no había avances que anunciar aún, pero que Qatar estaba «trabajando duro».
El emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani, cuya mediación fue clave para cerrar una primera tregua en noviembre, llegó hoy a París para una visita de dos días centrada en las negociaciones de tregua en Gaza.
Al Thani se reunió con el presidente Emmanuel Macron y luego participó en una cena a la que fueron invitados personalidades del mundo de la economía, de la cultura y del deporte.
Tanto el emir como el mandatario francés reafirmaron la voluntad de alcanzar rápidamente un cese el fuego entre Israel y Hamas en la Franja de Gaza, indicó el Elíseo, citó la agencia de noticias AFP.
Antes de llegar a Francia, el emir se reunió con el jefe político de Hamas, Ismail Haniyeh, en Qatar como parte de los esfuerzos para un «acuerdo para un cese el fuego inmediato y permanente», informó la agencia de noticias oficial Qatar News Agency.
Medios de Egipto, Estados Unidos, Qatar e Israel han informado que el borrador del acuerdo incluye la liberación de hasta 40 mujeres y rehenes de Hamas de edad avanzada a cambio de hasta 300 prisioneros palestinos, en su mayoría mujeres, menores y personas mayores.
La pausa propuesta de seis semanas en los combates permitiría que cientos de camiones ingresaran en Gaza con ayuda humanitaria que es desesperadamente necesaria para los civiles palestinos.
Biden, que ha mostrado un apoyo incondicional a Israel durante toda la guerra, dijo que cree que el gobierno de Netanyahu ha ralentizado sus ataques aéreos sobre Rafah, donde vive ahora más de la mitad de los 2,3 millones de habitantes del enclave luego de haber huido de otras ciudades.
«Tienen que hacerlo, y se han comprometido conmigo a que se asegurarán de que exista la capacidad de evacuar porciones significativas de Rafah antes de ir a eliminar al resto de Hamas», dijo.
Netanyahu ha dicho que un ataque terrestre contra Rafah es un componente inevitable de la estrategia de Israel para aplastar a Hamas.
El lunes, el Ejército presentó para la aprobación del Gabinete planes operativos para la ofensiva, así como planes de evacuación de civiles palestinos.
En las últimas 24 horas, 96 personas murieron en la Franja de Gaza, con lo que ya son al menos 29.878 los muertos y más de 70.000 los heridos en bombardeos israelíes en el enclave y en combates desde el inicio de la ofensiva contra Hamas, el 7 de octubre, según el Ministerio de Salud del Gobierno de Hamas en Gaza.
La ofensiva comenzó luego de que milicianos de Hamas infiltrados desde Gaza en el sur de Israel mataran ese día a unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y secuestraran a otras 240, incluyendo a una veintena de argentinos.
El primer y único alto el fuego de la guerra, a fines de noviembre, permitió la liberación de unos 100 rehenes -en su mayoría mujeres, niños y ciudadanos extranjeros- a cambio de unos 240 palestinos encarcelados por Israel, durante una semana sin bombardeos ni combates.
Aproximadamente 130 rehenes permanecen en Gaza, pero Israel dice que alrededor de una cuarta parte de ellos están muertos.
La violencia se ha extendido a Cisjordania, los otros territorios palestinos, que están ocupados por Israel, y a otras partes de Medio Oriente donde o desde donde milicias árabes propalestinas han atacado bases militares de Estados Unidos y el territorio de Israel.
En Cisjordania, tropas israelíes mataron el lunes a tres palestinos durante una operación en el campamento de refugiados de Faraa, cerca de la norteña ciudad de Tubas, informó el Gobierno autónomo de la Autoridad Nacional Palestina (ANP). (ver recuadro)
Autoridades del campamento de refugiados dijeron que uno de los muertos era miembro de un grupo armado que luchaba contra la ocupación israelí que y los otros dos eran civiles «que se encontraban en sus hogares y que fueron abatidos por francotiradores».
Además, Estados Unidos dijo que el lunes destruyó drones y sistemas de misiles de crucero antibuques de los rebeldes hutíes de Yemen, que han estado atacando a barcos en el mar Rojo.
Al principio, estos ataques se dirigían teóricamente solo a buques vinculados con Israel, pero en las últimas semanas se ampliaron a barcos de Estados Unidos y Reino Unido, que han lanzado bombardeos sobre las posiciones de los rebeldes yemenitas.
Ambos países, de hecho, impusieron sanciones contra dos iraníes y tres entidades que facilitan y apoyan las operaciones de los hutíes, anunció el canciller británico, David Cameron.
Las sanciones incluyen a Mohammad Reza Fallahzadeh, subcomandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, y Sa’id al-Jamal, un financiero que dirige una red de empresas pantalla y buques que benefician económicamente a los hutíes.