Jimena Barón apuntó contra las nutricionistas que utilizan su imagen como ejemplo de lo que está mal. Harta de las críticas, la artista hizo un contundente descargo relacionado con su alimentación y entrenamiento.
En sus historias de Instagram, contó que después de ejercitar mucho tiempo sola, decidió recurrir a un gimnasio para profundizar su trabajo. Después de contar cuáles son sus nuevos objetivos en entrenamiento, hizo un paréntesis para defenderse de las críticas.
“Basta a las nutricionistas o las coaches, no sé quiénes son, con poner imágenes mías y decir ‘porque esto es un mal ejemplo’”. “Es un mal ejemplo, porque no hay que hablar de cuerpos ajenos”, se defendió. Y continuó: “Si vos me seguís, Miriam, Mabel, Esther… quien sea que está usando mi foto para decir que yo soy mal ejemplo de algo, estás mintiendo porque yo entreno muchísimo y como muchísimo”.
Indignada, Barón denunció: “Es una reverenda poron… y debe terminar esto de usar el cuerpo del otro para decir ‘esto no está bueno’ o ‘esto es re peligroso’. Usá el tuyo, googleá la imagen de una suricata… No pongas mi foto ni la de mis colegas. Estoy harta porque de repente son todos modernos, avanzados y empáticos, pero no paran de opinar de cuerpos ajenos”.
Tras destacar que ella entrena y se alimenta muy bien para estar como está, advirtió: “No pongas mi foto, maldita nutricionista, que seguramente le da seis almendras a tus clientes”.
A modo de cierre, llamó a la reflexión. “Si yo, a pesar de amar mi cuerpo y registrar que es muy lindo, me encanta y lo amo, quiero llegar a otro lugar, a otro punto y tengo como meta tener más músculo, estar más marcada y agrandar mis brazos o lo que sea, déjame tranquila. Yo no estoy diciendo ‘no coman’ o ‘deshidrátense’. Déjenme en paz”. “Es mi cuerpo y si yo me veo regia, pero quiero seguir esforzándome para verme de otra manera, me dejan en paz”, sentenció.
Jimena Barón habló de su entrenamiento y contó que tomó una nueva determinación
Después de contar que recibe muchas consultas referidas a su entrenamiento, Barón expresó: “A mí me gusta entrenar sola porque siento que es un momento mental espectacular en donde uno domestica y adiestra los demonios”.
Dicho eso, la artista señaló que después de entrenar mucho tiempo sola, se armó una rutina que le gusta y con la que se siente cómoda, pero se “achanchó”. “Entonces ahora estoy para entrenar con alguien y que me haga hacer cosas que no me gustan”, sostuvo y explicó que por ese motivo empezó a hacer fierros en un gimnasio.
“Yo soy muy musculosa, fibrosa, me marco muy rápido… Y mi miedo era quedar como Tronchatoro. Le voy a dar una chance. De todos modos, le estoy metiendo con mucho aeróbico para chupar y limpiar un poco porque yo quiero estar esbelta, pero fuerte”, remarcó sobre su objetivo.