El primer caso en personas entrerrianas fue detectado los últimos días de 2023, al tiempo que se atendió a otras dos con síntomas compatibles -en los departamentos de Gualeguay y Victoria-, de los cuales una persona murió al padecer otras complicaciones de salud.
También la Dirección de Epidemiología provincial señaló que hay otros dos casos sospechosos en estudio, por lo que ya enviaron las muestras al Instituto Nacional Maiztegui, en provincia de Buenos Aires, donde serán sometidas a múltiples exámenes.
La enfermedad es causada por un virus que se transmite a través de la picadura de mosquitos infectados que actúan como vectores, principalmente en áreas rurales.
El virus circula en la naturaleza entre pájaros, pequeños roedores y mosquitos de un modo difícil de detectar, y en ocasiones afectan a caballos, generando brotes de enfermedad en este animal, y a veces en seres humanos.
Al detectar contagios luego de 25 años sin casos, el Ministerio de Salud de la Nación emitió a fines de noviembre la emergencia sanitaria nacional y puso en marcha la vigilancia epidemiológica en humanos, detectando casos positivos en varias provincias.
Las últimas detecciones de la enfermedad en Entre Ríos habían sido en 1983 y 1996, por lo que la cartera sanitaria nacional avanzó con el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y otros organismos nacionales, provincias y municipios, acciones de prevención, vigilancia epidemiológica y control.
En ese marco, una mujer que residía en la zona rural de Gualeguay y de más de 65 años falleció luego de contagiarse de encefalitis equina, ya que «era una paciente con enfermedades crónicas», afirmaron desde el Ministerio de Salud entrerriano.
Otro caso confirmado corresponde a un adolescente de Victoria que reside en una zona donde había equinos enfermos, y fue derivado al hospital infantil San Roque de Paraná, donde ya fue dado de alta.
Mientras que el tercer caso registrado en Entre Ríos, que fue el primero en obtener el diagnóstico, corresponde a un hombre que vive en Santa Elena, en el noroeste de esa provincia, y que evolucionó favorablemente.
En humanos, la encefalitis equina del oeste tiene un periodo de incubación de 2 a 10 días, y la mayoría de los casos son asintomáticos o leves con fiebre, cansancio, dolores musculares y malestar general que se resuelven en 7 a 10 días.
Para prevenir nuevos casos, el Gobierno de Entre Ríos recomendó el saneamiento ambiental de los predios donde se alojan caballos, evitar la proliferación de mosquitos, realizar un desmalezamiento y uso de ropa clara y manga larga para personas que trabajan o viven en lugares propicios para el desarrollo de mosquitos o donde se alojan caballos.