La urgencia del expresidente Mauricio Macri por apurar la interna del PRO y desplazar de la cúpula nacional al armado de Patricia Bullrich empezó a chocar con autoridades en el interior. Entre esos distritos, el rol de Córdoba no es menor. El año pasado la presidencia provincial quedó en manos del diputado Oscar Agost Carreño, quien en la Cámara baja integra la bancada de Emilio Monzó y Nicolás Massot, y desairó una convocatoria a Zoom esta semana para discutir temas partidarios.
«El único que está pensando en la interna es Macri. El resto está cada uno en la suya que no es poco», razonaron dos fuentes del PRO que ven cómo el expresidente empezó a tantear el terreno electoral puertas adentro.
En Córdoba, después de los portazos del año pasado con muchos dirigentes que se fueron con el peronismo, se calmó el clima de intervención por el que tambaleó Agost Carreño. Chance que, incluso los detractores del actual diputado despejaron en diálogo con LPO.
«Hay cierta calma hasta que pase el verano. El propio Oscar paralizó el clima dentro del partido», reconoció una fuente que no descarta que, aquellos que se fueron a integrar las filas del oficialismo provincial con Llaryora, entren en la interna. Sobre todo, el exintendente de Marcos Juárez y actual ministro de Industria provincial, Pedro Dellarossa; o el titular de la cartera de Turismo y expresidente del PRO cordobés, Darío Capitani.
Éste último es un alfil del exministro de Turismo de Macri, Gustavo Santos, aunque tiene peso propio y es el jefe político de Karina Bruno, legisladora provincial del PRO que le rompió la oposición a Rodrigo de Loredo en la Legislatura provincial para armar un bloque unipersonal. Banca que, en este contexto de paridad legislativa, tiene un volumen importante a la hora de inclinar la balanza en cada sesión entre el oficialismo llaryorista y la oposición de Juntos por el Cambio.
En tanto, la no intervención del partido le dio aire a Agost Carreño y voces que no simpatizan con el actual diputado en la presidencia del PRO reconocieron que uno de los que frenó la mano porteña para desplazarlo en 2023 fue el también diputado Diego Santilli. «‘El Colorado’ se plantó y dijo que, si lo movían a Oscar, había que sacarla también a Patricia (Bullrich) por haberse ido con (Javier) Milei. Mirá cómo terminaron las cosas», dijo una fuente del partido.
Agost Carreño, en tanto, confía en el scrum del interior para que los porteños no se lleven puesto al partido. Y se escuda, específicamente, en el peso de los gobernadores que se le plantan a Macri y no quieren al expresidente al mando del espacio.
Igual, por lo que le hizo saber el propio diputado a otros cordobeses, no desconoce lo que adelantó LPO en ocasión del arribo de la vicepresidenta Victoria Villarruel a Córdoba y el diálogo del expresidente con los G25 del Gran Córdoba para que se sumaran a una foto con la titular del Senado. «Tanto (Pablo) Cornet, que es intendente de Villa Allende, como Adela (Arning) que es la intendenta de Mendiolaza reciben llamados de Darío (Nieto) o de (Guillermo) Dietrich por orden de Macri. Pero es difícil saber cuánto de eso se trasladaría a la interna», dijo una fuente.
A kilómetros de distancia, desde su residencia en Madrid, el hombre fuerte del turismo regional, Gustavo Santos, también explora las definiciones de Macri en Córdoba. Al igual que lo hace la exdiputada y actual concejala capitalina, Soher El Sukaría. «Si hay que jugar, no tengas ninguna duda de que lo van a hacer por Mauricio. Sobre todo, en lo partidario, ella. Gustavo evita esta rosca», dicen de la actual vicepresidenta del PRO en la provincia.
Como para Bullrich jugará la diputada nacional y vicepresidenta a nivel nacional, Laura Rodríguez Machado. Hoy, con peso en la Cámara baja y con legisladores provinciales que le responden, al igual que a Sukaría y Agost. «Todos tienen un pie en la Unicameral y siempre se habla de una avanzada de Llaryora por esa porción del bloque», recordó un amarillo a días del inicio de sesiones ordinarias en la Legislatura provincial el próximo jueves.
Así como Bullrich y Macri tienen referentes en Córdoba, lo de Horacio Rodríguez Larreta es más difuso. Hay cordobeses que trabajaron en la campaña 2023 para él y no saben cómo será el futuro del exjefe de Gobierno porteño: «están los que le piden que se largue y arme algo nuevo; y los que le dicen que tiene que cerrar filas con Patricia para patear a Macri».
Agost Carreño y el propio Héctor Baldassi, quien desde hace un buen tiempo trabaja en tándem con Álvaro González en Diputados, supieron construir un vínculo directo con Larreta. El primero fue funcional además desde lo orgánico, pero le rompió el bloque a Ritondo para irse con Monzó y Massot; el segundo, fue efectivo en campañas, pero los tecnócratas no lo dejaron asomarse a la cuestión orgánica. Nunca presidió el partido.
Y a ellos, hay que sumar el también larretista y expatriado Pretto, el actual viceintendente del peronista Daniel Passerini que, aún expulsado, tiene tentáculos para jugar en la interna amarilla si quiere.
