Es un ligero deportivo eléctrico previsto para 2025
La firma británica Caterham ha desvelado su nuevo deportivo eléctrico, el llamado Caterham Project V. En esencia, este Caterham Project V sigue la misma filosofía que el Caterham Seven, centrada en la deportividad y la ligereza, aunque en este caso es 100% eléctrico y, además, de cabina cerrada, puesto que es un deportivo de estilo coupé. En principio, podría unirse al catálogo de la marca a finales de 2025 o principios de 2026.
Desde un inicio el Project V fue concebido como un coche eléctrico y ha sido diseñado por el responsable de diseño de Caterham, Anthony Jannarelly. A pesar de su naturaleza eléctrica, consigue un peso de 1.190 kilogramos, que no está nada mal, y además es de propulsión.
El modelo, en configuración 2+1 (2+2 opcional), está basado en un chasis de fibra de carbono y aluminio, y recurre a una suspensión de dobles triángulos en ambos ejes y totalmente ajustable, junto a una dirección de asistencia eléctrica o llantas de 19 pulgadas delante y 20 detrás, calzadas con neumáticos Michelin Pilot Sport 4S.
El motor eléctrico del Project V, instalado en el eje trasero, ofrece 200 kW o 272 CV de potencia y se combina con una batería de iones de litio de 55 kWh, que sobre el papel facilita una autonomía de unos 400 kilómetros y, además, permite carga rápida con corriente continua a un máximo de 150 kW (20 al 80% en 15 minutos).
Caterham estima unas prestaciones más que decentes para su eléctrico, gracias en parte a su contenido peso, con un 0 a 100 km/h en menos de 4,5 segundos y una velocidad máxima de 230 km/h. Además, el modelo tendrá tres modos de conducción: Normal, Sport y Sprint.
El habitáculo, con tres o cuatro asientos según la configuración elegida, goza de un tablero de diseño minimalista, con una instrumentación de dos esferas digitales justo delante del volante, otros tres relojes en el centro del salpicadero o una pequeña pantalla multimedia para ‘replicar’ nuestro smartphone.
El propio CEO de la marca inglesa, Bob Laishley, ha afirmado que el coche no es un mero prototipo o ejercicio de diseño, ya que están trabajando en hacerlo realidad para dentro de dos años y medio, aproximadamente, con un precio objetivo en Reino Unido inferior a 94.000 dólares.