El sociólogo y analista Eduardo Fidanza se refirió al panorama político que se avecina luego de los renunciamientos de Cristina Kirchner y Mauricio Macri a ser candidatos en las próximas elecciones presidenciales y anticipó que el déficit político de ambos los obliga a buscar refugio donde son más fuertes. “Los líderes en el ocaso se vuelven conservadores” describió.
El politólogo aseguró que la estrategia no es nueva y ocurrió en mucha otra oportunidades. “Estos líderes en el ocaso se vuelven conservadores, y en primer lugar son conservadores de territorio. Cristina se está replegando junto con los suyos a la Provincia de Buenos Aires, como Macri está diciendo ‘la capital me pertenece’”.
“Acá vamos a tener a dos líderes en el ocaso, buscando territorios a donde se van a replegar, para seguir influyendo cada vez menos en la política argentina”, aseguró Fidanza en un reportaje concedido a Jorge Lanata en su programa Lanata sin filtro, en radio Mitre.
¿Existe el kirchnerismo sin Cristina?
“Quienes querían más que nadie una candidatura de CFK eran los propios, para que el espacio logre la mejor elección posible. Pero para muchos lo de ayer sonó a rendición. ¿Correrse rompe con la esencia del kirchnerismo?”, le preguntaron a Fidanza.
“El kirchnerismo con Cristina no va a existir más, porque es una contracción. La pregunta ahora es qué viene. Lo interesante es buscar figuras de transición”, consideró.
Para el politólogo, una de las posibilidades es que finalmente sea ungido como candidato el ministro del Interior, Eduardo de Pedro . Fidanza cree que “Wado” representaría más genuinamente un puente entre ese ocaso de Cristina Kirchner y una continuidad mucho más realista, pragmática y abierta al futuro. “Wado de Pedro, un político joven referenciado claramente en Cristina, no ha tenido dificultades en cócteles con el mismo diablo. Esa figura puede ser la de una transición entre el cristinismo que es cerrado y dogmático, y la posibilidad de una apertura. Massa pudo haber sido esa figura, pero seguramente no lo va a ser”, añadió.
Al ser consultado sobre cuánto puede quebrarse el paragüas si ella no es candidata y cuánto puede complicar la poca cohesión que tenía la coalición de gobierno y el impacto de eso en la gestión, Fidanza fue contundente: “Lo puede complicar bastante”.
“Esa carta significa que lentamente le va soltando la mano a Massa. Allí menciona que los dos presidentes que se comprometieron con el FMI perdieron aptitud electoral. Además de Macri, se refiere a Alberto Fernández. Y se puede argumentar que los que siguen con el FMI tampoco van a tener aptitud electoral. Creo yo que eso es para Sergio Massa”, reiteró.

Desde este análisis político se desprende que la vicepresidenta está abandonando cualquier esperanza de que esto se pudiera enderezar. “Como pasó antes, Cristina está ejerciendo la oposición dentro de su propio gobierno. Y a medida que profundice esta actitud, por un lado suelta al gobierno a su suerte y, por otro lado, puede tener un discurso más coherente, aunque es contradictorio porque es el gobierno que ella creó. Pero es una licencia que se toma en el ocaso”, reflexionó Fidanza.
La reconstrucción
Fidanza consideró que el kirchnerismo es un ciclo que termina dentro del peronismo, como en su momento el menemismo, aunque afirma que va a continuar porque no es solamente un partido político. “El peronismo es un rasgo cultural de la Argentina y además se expresa en corporaciones, las que van a subsistir y habrá que ver cuál es entonces la continuidad política del peronismo y qué forma de reorganización tendrá cuando vuelva al llano”, advirtió.
“No sabemos cuál es el trauma que el peronismo va a tener después esto. No olvidemos que este es el primer gobierno peronista donde el valor del salario disminuyó. Aunque sea menguante, CFK mantiene una base electoral que es el piso de cualquier emprendimiento electoral que tenga el oficialismo”, afirmó el politólogo.
En tal sentido, opinó que si se designara un candidato único, no debería sorprender que siendo sólo votado por la base electoral de Cristina (más de 20 y menos de 25 puntos) llegue en segundo lugar en las PASO. “Esa foto, donde estaría Milei primero, en segundo lugar el candidato del oficialismo y en tercer lugar el de Juntos por el Cambio, no es algo que haya que desechar. No le va a permitir llegar a un balotaje, pero puede ser el principio de una reconstrucción posterior a perder el poder de parte del peronismo”, reiteró.
¿Un candidato para perder?
Para Fidanza este escenario sería el que estaría manejado el oficialismo. Porque perder en la carera política no necesariamente es desaparecer. Hay casos paradigmáticos como por ejemplo el de Lula. “Un candidato joven que por primera vez pierde una elección presidencial, esto no lo invalida”, consideró.

Según reveló, Kicillof está fortalecido y es el que tiene más chances de retener el principal distrito electoral del país. “Moverlo de un triunfo probable en la Provincia a una derrota muy probable en Nación, no sé si eso cierra en la estrategia de Cristina”, concluyó.