Silvia Corradi está desesperada y ya no sabe qué más hacer. Su hija, María de la Paz, tiene cáncer de huesos y vive en Francia. Pero como ella está vacunada con las dosis de la vacuna Sputnik V, que no está aprobada en la Unión Europea, no se le permite viajar al país galo para acompañarla.
Desesperada, intentó incluso viajar a terceros países para recibir una vacuna que le permita reencontrarse con su hija pero hasta el momento todo fue en vano. Ahora, tras enterarse que la OMS suspendió el proceso de aprobación de la vacuna Sputnik V debido a una serie de irregularidades, la situación es más desesperante.
En diálogo con Canal Doce de Córdoba contó que Marías de la Paz vive hace 15 años en Francia, que está casada y que tiene 3 hijos. “Yo habitualmente iba dos o tres veces (por año) a visitarla hasta 2019, cuando se le detectó un cáncer y, entre la operación y las quimioterapias, me quedé un tiempo allá acompañándola”, comenzó recordando.
Luego llegó la pandemia y el encierro compulsivo hizo que solo se pudieran mantener en contacto por vía virtual, hasta que, a fines del año pasado, cuando comenzó el proceso de vacunación, Silvia creyó que veía la luz al final del túnel. “Confié en lo que nos decían, me anoté y, como tengo 71 años, me llamaron enseguida. Me di la primera dosis a fines de febrero y la segunda a fines de marzo. En ese momento la que se daba era la Sputnik, de la que se hablaban maravillas”, expresó y recordó que en aquel momento pensaba que era “un tema de papelerío” y que pronto sería aprobada por la Unión Europea.
